viernes, 9 de octubre de 2009

Toques

Tu pelo se soltó de la cinta que llevabas puesta,
en un movimiento ondulado que me atrapó.
Intentabas generarle toques con tu manos que se entrelazaban haciéndolo marmolado.
No había luz natural que entrara por la ventana, igual, el aura que te envolvía se dejó ver.
Mis manos, más que nunca, querían ser la tuyas.