jueves, 25 de junio de 2020

me acuerdo mí acuerdo




Me acuerdo de estar con el cuadernillo de caligrafía, intentando repetir el ejemplo lo más parecido posible, una y otra vez, en el mismo renglón, con mi Parker de tinta azul no queriendo traspasar la hoja.


Me acuerdo que un día lo fui a comprar a la librería, que el papel era grueso, espeso de un color amarillento, porque blanco no era. De tapa troquelada, rectangular, apaisado. Que lo toqué y le hice flamear las hojas para contar en el aire su tiempo.


Me acuerdo de tratar de embocarle con equilibrio, de encontrar mi forma de esgrimir la lapicera, con destreza, con estilo en unísono ritmo.  
Me acuerdo que empezábamos con la A en minúscula, mayúscula, imprenta y cursiva. La B. La C__________________________hasta Z y así hasta llegar a las palabras…


Me acuerdo de la práctica, de la pluma moviéndose para no cometer errores de los comunes denominadores de la estética. Recuerdo reforzar en ésa época la ética y la réplica. La concentración sin fuerza.


Me acuerdo sin fecha exacta que lo completé y que lo volví a ver desde el principio. La segunda y la tercera y la cuarta parecían letras miedosas. Desde la quinta sin correcciones mías, y con la letra Maestra al final de cada renglón a veces tildadas, a veces su rojo y encontraste, mi pluma azul.